WASHINGTON (AP) — Los legisladores enfrentan la delicada tarea de intentar obtener el testimonio de la persona que denunció el accionar del presidente Donald Trump con Ucrania. Aseguran que están preocupados por la seguridad del informante, en especial después de que el mandatario dejó entrever en una serie tuits que cree que se trata de una traición.
Las comisiones de inteligencia de la Cámara de Representantes y del Senado han negociado durante más de una semana con los abogados del denunciante y con el director interino de Inteligencia Nacional Joseph Maguire para garantizar que la persona esté protegida en caso de que testifique a puertas cerradas. El informante está dispuesto a hablar ante el Congreso, afirma su equipo legal, pero únicamente si Maguire puede garantizar su anonimato y seguridad ante posibles represalias.
“Desafortunadamente, prevemos que la situación empeore, y que se vuelva más peligrosa para nuestro cliente y para cualquier otro denunciante, mientras el Congreso busca investigar este asunto”, escribió Andrew Bakaj, uno de los abogados en una carta dirigida a Maguire el domingo.
Bakaj hizo referencia a los comentarios de Trump de que quiere saber quién es el informante, y que las personas que le dieron la información son “prácticamente espías”.
“Saben lo que solíamos hacer en los viejos tiempos, cuando éramos inteligentes, ¿verdad? Con los espías y la traición, ¿cierto? Solíamos manejarlo distinto a como lo hacemos ahora”, dijo Trump la semana pasada.
En un comunicado emitido el domingo, Bakaj y otros abogados del denunciante señalaron que trabajan con ambas comisiones y por el momento no se ha fijado una fecha para el testimonio. Dijo que los paneles están de acuerdo en que “proteger la identidad del denunciante es primordial”.
El presidente de la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam Schiff, dijo el domingo al programa “Meet The Press” de NBC que el denunciante comparecería “espero que muy pronto”.
Las preocupaciones de seguridad resaltan la naturaleza sin precedentes de la denuncia y la tormenta política que ha generado. Los demócratas intentan que la acusación sea el centro de su investigación de juicio político, lo que ha causado dudas sobre si el informante podrá permanecer en el anonimato.
“Creo que a todos nos preocupan las filtraciones”, dijo el senador Mark Warner, el demócrata de mayor rango en la Comisión de Inteligencia, durante una entrevista el lunes con The Associated Press. Warner está alentando a sus colegas republicanos a denunciar los comentarios del presidente respecto al informante y que reiteró durante todo el fin de semana en una serie de tuits.
