Créeme, no quieres tocar estos tres lugares de un avión

Por mucho que las compañías aéreas se esfuercen por mantener limpios los aviones de sus grandes flotas, los cortos tiempos de respuesta a los que tienen que hacer frente no les permite desinfectar todas las superficies.

Ilustración de una mujer sentándose en un avión

Esto nos lleva a una pregunta obvia: ¿cuáles son los lugares más sucios de un avión?

Según un estudio realizado por microbiólogos y financiado por Travel math, un punto de acumulación de bacterias se encuentra en las bandeja que hay detrás de los asientos.

En dicho estudio, los microbiólogos encontraron un promedio de 13.903,198 formaciones de colonias (UFC) por centímetro cuadrado en las bandejas de cuatro aviones distintos.

En contraste, solamente se encontró un promedio de 1.709,674 UFC por centímetro cuadrado en el botón de desagote del inodoro.

Drexel Medicine, la mutua de salud del Drexel University College of Medicine en Filadelfia, tiene su propia lista.

Aquí aparecen tres lugares de un avión tan repletos de gérmenes como las bandejas.

La primera zona no debería sorprender a nadie: los lavabos del avión.

“Con una media de un lavabo por cada 50 pasajeros, estos son los lugares con más gérmenes de un avión y el mejor caldo de cultivo para bacterias como la E. coli”, publicó Drexel Medicine en su página web.

Los profesionales de la salud recomiendan a los pasajeros que, en los lavabos, no toquen nada con las manos, así como que utilicen toallitas de papel para levantar la tapa del inodoro o activar el grifo.

Según Drexel, otra zona a evitar son los portarevistas que hay en la parte trasera de los asientos.

“Desde pañuelos usados a fragmentos de uñas cortadas, pañales sucios y todo tipo de materiales infestados de gérmenes, todo eso pasa por los portarevistas de los aviones”, señala Drexel Medicine.

Interior de un avión de Lufthansa

(Flickr/redoxkun)
Esta conclusión viene respaldada por un estudio reciente de la Universidad de Auburn en el que se descubrió que las bacterias pueden sobrevivir en los portarevistas de los aviones hasta una semana.

Esto nos lleva directamente a la siguiente cosa a evitar: las revistas que se ofrecen a bordo.

“Si bien es ciertamente tentador ojear la revista SkyMall (que ofrece productos que se venden en la tienda del avión), piensa en cuánta gente ha manoseado esas mismas páginas”, escribió Drexel.

La página web recuerda que las revistas solo “se limpian” una vez cada tres meses, cuando son sustituidas por otras.

La alternativa más aconsejable y menos germinal es que cada pasajero lleve consigo sus propias lecturas.

Business Insider

(Mike Nudelman/Business Insider)